La casa es muy curiosa, aunque muy antigua. En las fotos parece todo muy moderno, pero la realidad es otra, aunque no está mal. Algunas sillas y sillones necesitarían renovarse.El principal problema es que la cocina es pequeña y tiene muy poco espacio para lavar los cacharros y menos aún para secarlos. Teniendo en cuenta que hay que cocinar para unas 20 personas, este detalle es importante.Algunos de los baños necesitarian una reforma. Eso sí, el agua sale caliente y a buena presión. Las camas son cómodas. No pudimos disfrutar de los espacios exteriores porque hacía frío, pero el patio interior es encantador y tiene un gran espacio de cesped en el jardín. La piscina exterior también necesitaría un poco de chapa y pintura. Pilar, la chica que nos atendió fue muy amable y atenta.