La comunicación con los propietarios ha sido fácil y cordial. El piso está decorado con mucho gusto, hasta el último detalle. Te sientes como en casa. Super cómodo, tiene de todo. Las zonas comunes son amplias. Ventanales enormes con unas bonitas vistas hacia el centro del pueblo y la costa. Muy bien situado. No hicimos uso de la plaza de garaje porque mi coche no cabía, pero nos vino genial para dejar las bicis. Que cada habitación tenga su baño es una gozada. Las camas comodísimas, todo está recién puesto. Hemos estado de película, muchas gracias.