Al estar en el último piso es muy caluroso durante el día. Por la noche refresca, pero hay muchos mosquitos por la cercanía de una granja. Sería muy sencillo colocar unas mosquiteras en todas las ventanas y el problema estaría solucionado. También se echa de menos un congelador (sólo hay frigorífico) y un horno microondas, que tampoco es tan caro.
El resto bien, y los dueños muy amables y simpáticos.